En Becker Abogados, atendemos casos donde pequeñas y medianas empresas reciben demandas laborales con montos exorbitantes, muchas veces injustificados. Estas situaciones no solo ponen en jaque las finanzas de una empresa, sino que también afectan su reputación, su clima interno y su continuidad operativa.

La clave, como en muchas batallas legales, está en cómo y cuándo se responde. En este artículo te contamos un ejemplo típico de lo que podría ocurrirle a cualquier pyme chilena, y cómo una intervención legal oportuna puede marcar toda la diferencia.

     

    El problema: una demanda por montos excesivos que paraliza a la empresa

    Una pequeña empresa del sector servicios —con menos de 20 trabajadores y sin departamento legal— recibió una demanda laboral presentada por un ex trabajador. El demandante alegaba despido injustificado, pago de horas extraordinarias no registradas, feriados omitidos, diferencias en el finiquito y, como si fuera poco, una indemnización adicional por daño moral.

    La cifra total reclamada superaba los $20 millones de pesos. Para una pyme con flujo de caja limitado, ese monto representaba una amenaza real: podría significar el cierre del negocio o, en el mejor de los casos, un endeudamiento severo.

    La primera reacción fue de pánico. El equipo directivo no tenía claridad sobre los procedimientos legales, ni sobre los tiempos o consecuencias de una demanda mal gestionada. Incluso se consideró llegar a un acuerdo rápido, sin evaluar si el reclamo tenía o no sustento jurídico.

    La respuesta: actuar desde el primer día con estrategia y precisión

    Cuando la empresa contactó a Becker Abogados, aún estaban dentro del plazo de contestación judicial. Esa ventana fue crucial.

    Activamos inmediatamente nuestro protocolo de defensa de urgencia para empresas:

    • Revisión de todos los antecedentes laborales del trabajador: contrato, anexos, finiquito firmado, correos internos, registros de asistencia y evaluaciones de desempeño.
    • Análisis de los hechos descritos en la demanda: identificamos múltiples contradicciones entre el relato del trabajador y la evidencia documental.
    • Evaluación de testigos internos: jefaturas y compañeros del demandante confirmaron que varias de sus acusaciones eran falsas o exageradas.
    • Chequeo de jurisprudencia: en casos similares, los tribunales habían fallado mayoritariamente a favor del empleador, especialmente cuando existía un registro prolijo de las relaciones laborales.

    Además, se implementó una estrategia preventiva de comunicación, guiando a la empresa sobre cómo responder correctamente a los requerimientos de la Inspección del Trabajo, sin incurrir en errores que pudieran agravar la situación.

     

    Resultado: ahorro superior al 80 % y sin llegar a juicio oral

    Gracias al trabajo coordinado desde el inicio, logramos demostrar las debilidades del caso del demandante. En las audiencias de conciliación preliminares, se evidenció que gran parte de sus reclamos carecían de respaldo.

    El resultado fue una reducción del monto reclamado en más del 80 %, cerrando el caso por una cifra cercana a los $2 millones, correspondiente a conceptos efectivamente adeudados, pero sin asumir los daños morales ni las horas extras que no estaban respaldadas.

    Además, el caso se resolvió antes del juicio oral, evitando costos adicionales, exposición mediática y desgaste emocional para la empresa.

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    Lecciones clave: cómo evitar que esto le pase a tu pyme

    Este caso, aunque común, nos deja aprendizajes esenciales para cualquier empleador:

    1. Nunca subestimes una demanda, por pequeña que parezca

    Aun cuando creas que tu empresa ha actuado correctamente, si no cuentas con respaldo documental claro, el riesgo es real. Una acusación falsa, sin una defensa adecuada, puede terminar en una sentencia millonaria.

    2. Los correos, chats y documentos salvan empresas

    En este caso, parte clave de la defensa fueron los registros de correo electrónico y mensajes de WhatsApp que demostraban que el trabajador sí conocía y aceptaba las condiciones laborales. Todo cuenta como prueba cuando hay una demanda.

    3. No improvises bajo presión: busca asesoría legal inmediata

    Esperar hasta el último día o actuar de forma impulsiva —por ejemplo, respondiendo informalmente al trabajador o haciendo pagos no justificados— puede arruinar la defensa de tu empresa. Un abogado experto en derecho laboral debe ser tu primer contacto.

    4. Capacita a tu equipo de RR.HH. en gestión legal preventiva

    No basta con tener buenas intenciones. El equipo de Recursos Humanos debe tener protocolos claros para despidos, licencias, sanciones disciplinarias y manejo de conflictos, todo siempre documentado y validado por abogados.

     

    Checklist: ¿está tu empresa lista para enfrentar una demanda?

    A continuación, te dejamos una guía rápida para revisar si tu pyme está preparada legalmente ante un posible conflicto laboral:

    • ☐ ¿Todos tus contratos y anexos están firmados y actualizados?
    • ☐ ¿Cuentas con registro de asistencia validado?
    • ☐ ¿Se documentan por escrito las licencias, permisos y sanciones?
    • ☐ ¿Tienes respaldo de las comunicaciones con trabajadores (mails, chats, actas)?
    • ☐ ¿Tu equipo de RR.HH. sabe cómo actuar ante una citación judicial o una denuncia en la Inspección?

    Si respondiste “no” a alguna de estas preguntas, es momento de actuar antes de que llegue una demanda.

     

    Así protegemos a nuestros clientes en Becker Abogados

    Este caso es solo uno de los muchos en que nuestro estudio ha logrado reducir o anular el impacto de demandas injustas contra pymes. Trabajamos con empresas de todos los tamaños, ofreciendo:

    • Defensa especializada para juicios laborales complejos.
    • Asesoría preventiva y auditoría legal de relaciones laborales.
    • Respuesta rápida y efectiva desde la primera citación.

    Sabemos lo que está en juego. Por eso, más que un estudio jurídico, somos el aliado estratégico de las empresas que quieren seguir creciendo sin miedo a demandas maliciosas.